Sunday, January 18, 2009

Guantes Botados - Propósitos

Caminando por las calles de Pitt en invierno es fácil encontrarse con guantes botados en la vereda. Nadie los recoge, ni bota a la basura. Pueden estar ahí mucho tiempo, y la gente pasa de largo delante de ellos.
En términos prácticos es fácil explicarse por qué pasa esto. Normalmente, cuando no se usan, los guantes se guardan en los bolsillos externos de la chaqueta. Si decides no ponértelos, igualmente metes la mano en los bolsillos y es fácil así, dejar caer alguno sin darse cuenta. Un guante sólo no sirve de mucho para nadie, sirven para abrigar ambas manos de a pares, pero no de a uno, por eso nadie se toma la molestia de recogerlos. Además, podemos pensar que está la expectativa de que probablemente el dueño de dicho guante pase nuevamente por la misma ruta y reconozca la prenda perdida y para nuevamente juntarla con la otra todavía en su poder. Problema resuelto, y el guante no está más huérfano.
Me produce cierta tristeza ver todos esos guantes que desprendidos de su otro par, son ignorados por el mundo. Ya no tienen posibilidad de cumplir el propósito para el que fueron creados y desprendidos de su propósito y sentido no tienen ninguna utilidad. Su destino es permanecer en la vereda, ignorados y desechados. Queda sólo la esperanza de que vuelva a juntarse con su par correspondiente y su propósito sea restaurado.

Estas ideas sirven para sacarle mucha punta al lápiz, y hacer reflexiones metafísicas y comparaciones filosóficas con el sentido de la existencia. Por ahora, me limito a decir que me ha servido para nutrir algunos momentos de oración, a fin de no latear a ningún lector. Si algún comentario lo sugiere, podemos seguir dándole vueltas al tema.
Voy a andar con cámara en mano para registrar alguno de estos guantes solitarios.

1 comment:

Anonymous said...

Estimado tocayo:
Buen observador!

Hay toda una historia en Pitt acerca de los guantes huachos:

http://www.onecoldhand.com/